Vuelve a la casa de tu Padre.
Tu familia te espera.
Jesucristo murió de amor por ti y resucitó para mostrarte que gracias a Su amor dejo todo atrás: la vergüenza, miedo, mentira, pecado, daño, incluso la muerte.
Vuelve a casa.
El Padre nos ha mandado ponerte un anillo en tu dedo, calzado para tus pies y un vestido nuevo.
Todo está listo, estamos anhelando tu regreso.
Te esperamos con los brazos abiertos.
Comentarios recientes