Sextorsión

Judá y Tamar | Génesis 38

«Pero ella, cuando la sacaban, envió a decir a su suegro: Del varón cuyas son estas cosas, estoy encinta. También dijo: Mira ahora de quién son estas cosas, el sello, el cordón y el báculo». Génesis 38:25

Cuida tu integridad sexual.

Por más cuidado (y confianza) que tengas, el pecado siempre cobra y chantajea.

EL SELLO

Representa tu identidad, tu imagen y tu autenticidad.
Cuando te entregas al pecado, le estás dando permiso de manchar tu imagen y arriesgar tu futuro porque ahora eres esclavo de la persona con la que te involucraste. Un movimiento en falso y te exhibirá.

El CORDÓN

Representa el poder.
Con el cinturón sostenían la espada para atacar y defenderse. Una espada fuera de la vaina es ofensiva.
El pecado te va a dejar desarmado y te va a volver poco confiable. Además sin cinturón, no podrás moverte con facilidad, porque la túnica se te enredará en los pies.
Cuando entregas el cinturón para obtener o dar placer momentáneo a alguien te vuelves torpe, te quedas sin libertad (porque ahora estás a merced de alguien más) y es probable que cualquiera pueda inclinarte a seguir pecando.

EL BÁCULO

Es la vara que usaban los pastores de ovejas. Representa el apoyo, sostén y consuelo.
También es un símbolo de autoridad, de protección, de guía y defensa y de discernimiento.
Cuando entregas el báculo a cambio de pasiones prohibidas quedan débil y desprotegido, pierdes autoridad y además de quedar expuesto, expones también a tus familiares y a los que han confiado en tí.
Sin el báculo ya no podrás ayudara otros porque estás desarmado y muchos quedarán presos del pecado y las circunstancias y por si fuera poco, sin el báculo no podrás separar lo bueno de lo malo, ni identificar una enfermedad o problema en lo que hagas, porque has perdido la capacidad de razonar porque el pecado ha endurecido tu corazón y no lo vas a notar fácilmente.

La integridad sexual de José contrasta con la de su hermano Judá.

La Palabra de Dios en la Biblia nos enseña, a través de toda la historia del pueblo hebreo, las ocasiones de caer y cómo nos sirven para prevenir en la vida cotidiana.

Si alguna vez creíste que conservar tu virginidad hasta el matrimonio era una pérdida de tiempo, la historia de José te puede ayudar a ver cómo el Señor engrandece a los que son fieles a su Palabra; y la de Judá, a conocer el torbellino de perversidad en los que puedes caer por alejarte de tu familia, de tus hermanos y del camino, y llevarte a el desenfreno moral.

Si la has perdido tu pureza sexual, te invito a hacer un compromiso de santidad con el Señor, él puede restaurar a todos los que se arrepienten de corazón y darles un futuro y una esperanza increíbles, lo hizo con Judá y lo puede hacer contigo también.

Así que, si alguno se limpia de estas cosas, será instrumento para honra, santificado, útil al Señor, y dispuesto para toda buena obra. Huye también de las pasiones juveniles, y sigue la justicia, la fe, el amor y la paz, con los que de corazón limpio invocan al Señor.

 

2 Timoteo 2:21-22

Dios se especializa en hacer todo NUEVO.