Respondiendo Simón Pedro, dijo: Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente.
Mateo 16:16
En este pasaje, Jesús les hace dos grandes preguntas a sus discípulos: ¿quién dice la gente que soy y quién dicen ustedes que soy?
Hasta este momento, ni los mismos discípulos lo sabían con certeza.
Para muchos era una persona importante, para otros un sabio maestro, un profeta, un hombre extraordinario con poder extraordinario; entonces Pedro recibe una revelación de Dios y hace una declaración que es la roca sobre la que está construida la iglesia, el fundamento práctico de la fe: Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente.
El salmo 62 lo proclama en todo su extensión: El solamente es mi roca y mi salvación Jesucristo es la roca sobre la cual está fundamentado todo cristiano.
Jesús compartió a sus discípulos la parábola de los dos cimientos: “Cualquiera, pues, que me oye estas palabras, y las hace, le compararé a un hombre prudente, que edificó su casa sobre la roca… Pero cualquiera que me oye estas palabras y no las hace, le compararé a un hombre insensato, que edificó su casa sobre la arena«. (Mateo 7:24-27)
Muchos siguen desechando esta enseñanza (fundamento) porque no la oyen (no la conocen), o incluso hay quienes la conocen pero no la hacen, y en ello estriba la diferencia para permanecer o caer.
Si quieres averiguar quién es Jesús, busca en el lugar correcto y descúbrelo tú mismo.
Él es el Verbo (la palabra) hecho carne, registrado totalmente en La Biblia.
Pídele al Espíritu Santo que abra tus oídos para escuchar al mismo Jesús, el Hijo del Dios viviente, decírtelo.
Léela, estúdiala y practícala y recibe la bendición de la vida eterna para ti y todos los de tu casa.
Respondiendo Simón Pedro, dijo: Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente.
Mateo 16:16
Saber quién es Jesús te ayudará a saber quién eres tú y qué puede hacer por ti.
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