¿Milagros?

Vi una de sus cabezas como herida de muerte, pero su herida mortal fue sanada; y se maravilló toda la tierra en pos de la bestia.

Apocalipsis 13:3

En Apocalipsis, el símbolo del dragón representa al diablo, y el de la bestia al anticristo.El anticristo recibirá poder del diablo y hará cosas que maravillen a los demás, pero tú debes tener cuidado, porque el diablo también tiene poder. Satanás también hace milagros y le da poder a los que le siguen.Pablo advierte a la iglesia de Corinto, y a nosotros también:

Porque éstos son falsos apóstoles, obreros fraudulentos, que se disfrazan como apóstoles de Cristo. Y no es maravilla, porque el mismo Satanás se disfraza como ángel de luz. 2 Corintios 11:13-14

Un ángel que sirve a Dios jamás dejará que te inclines ante él o le rindas tu corazón y tu afecto. Muchos ángeles que la Biblia menciona le impiden a los profetas inclinarse ante ellos.

Y me dijo: No hagas eso; yo soy consiervo tuyo y de tus hermanos los profetas y de los que guardan las palabras de este libro. Adora a Dios. Apocalipsis 22:9

Lucifer también es un ángel ¿recuerdas?, pero él se corrompió de tal manera que fue consumido por el fuego del altar por su soberbia y por comprar favores de los demás. Por desviarlos del camino a Dios.

A causa de la multitud de tus contrataciones fuiste lleno de iniquidad, y pecaste; por lo que yo te eché del monte de Dios, y te arrojé de entre las piedras del fuego, oh querubín protector. Ezequiel 28:16

Satanás encontró la manera de “vender” los favores de Dios, de guiarlos hacia él para que no tuvieran que “acercarse” a Dios.

“Pídeme a mí para que yo le diga”

Todo aquello que te impide acercarte a Dios directamente, te está desviando, aunque se disfrace de ángel de luz.

Sólo hay una manera de presentarnos delante de Dios apropiadamente, y es por seguridad: a través de Jesucristo.

Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí. Juan 14:6

¿Por qué es el único camino?

Porque el pecado nos impide estar delante de un Dios santo, pero el sacrificio de Jesús nos cubre nuestros pecados.

La santidad de Dios, su eterno poder y gloria nos mataría inmediatamente. Moisés le rogó a Dios ver su gloria y éste le contestó:

No podrás ver mi rostro; porque no me verá hombre, y vivirá. Y dijo aún Jehová: He aquí un lugar junto a mí, y tú estarás sobre la peña; y cuando pase mi gloria, yo te pondré en una hendidura de la peña, y te cubriré con mi mano hasta que haya pasado. Éxodo 33:20-22

La hendidura en la peña, la herida en la roca, es el sacrificio de Jesús, que fue herido por nuestros pecados, pero que gracias a su amor por nosotros, podemos escondernos en el hueco de su costado, junto a su corazón que explotó de amor hasta que salió sangre y agua, para limpiarnos y hacernos aceptables delante de Dios, aunque seamos pecadores.

Él fue el sacrificio perfecto y el sacerdote perfecto, limpio de pecado.

Por esa razón, sólo Jesús, es el único digno de recibir el honor y la gloria de tu corazón. Nadie más tiene la capacidad de hacer eso, aunque hagas milagros y deslumbren con su poder.

El mundo le pertenece actualmente a satanás, y por ello, la iniquidad está en medio de nosotros, pero el ángel de Dios nos dice, como a Juan en Apocalipsis: Sube acá, para que veas lo que sucede en el cielo.

Te dice también: Ven y mira, todo lo que sucederá en la tierra, para que estemos atentos y no seamos engañados, y si ya lo hemos sido, tengamos la oportunidad de arrepentirnos y cambiar nuestra forma de vivir.

Adora sólo a Dios cuando el diablo haga milagros.

Lee 2 Tesalonisenses 2, Ezequiel 28:11-19, Apocalipsis del 13 al 18

Escucha en un momento libre: https://www.youtube.com/watch?v=LYho-yU5nkY