Vivía en Filipos, una importante ciudad de Macedonia y era una empresaria exitosa de tinturas púrpuras que adoraba a Dios. Luego de asistir a una reunión de oración con otras mujeres, Dios abrió su corazón para escuchar el mensaje de salvación y fue bautizada junto con su familia, la cual incluía a sus siervos, lo cual detalla su nivel de influencia. Ella rogó a Pablo y Silas que se quedaran en su casa, revelando el don de la hospitalidad en su corazón dispuesto.
¿Qué lección podemos encontrar?
- Dios nos capacita cuando abrimos nuestro corazón con fe.
- La oración debe ser una prioridad en nuestra vida y en todo lugar.
- Nuestros negocios son una buena oportunidad para compartir y servir a Jesús.
- Cuando somos obedientes, Dios nos revela más de él de lo que creemos ya saber.
- Dios ve el hambre de conocerle y la satisface a través la oración y la enseñanza de su iglesia.
¿Tú puedes encontrar alguna otra?
¿Hay algo en la vida de Lidia que puedas aplicar el día de hoy?
¿Qué quiere decirte Dios sobre esto?
No os olvidéis de la hospitalidad, porque por ella algunos, sin saberlo, hospedaron ángeles.
Hebreos 13:2
Ella es una de tantas mujeres ¡que tienes que conocer! ¡Comparte esta información con alguien más!
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