Cuando Jesús nació en Belén de Judea en días del rey Herodes, vinieron del oriente a Jerusalén unos magos, diciendo: ¿Dónde está el rey de los judíos, que ha nacido? Porque su estrella hemos visto en el oriente, y venimos a adorarle. Oyendo esto, el rey Herodes se turbó, y toda Jerusalén con él.

…y (Herodes ) enviándolos a Belén, dijo: Id allá y averiguad con diligencia acerca del niño; y cuando le halléis, hacédmelo saber, para que yo también vaya y le adore.

(Mateo 2:1-3,8)

No se turbe tu corazón, cédele tu trono al verdadero Rey y deja que gobierne tu vida.

En su reino hay justicia, gozo y paz; y delicias a su diestra para siempre.

Romanos 14:17 | Salmos 16:11