Porque el Hijo del Hombre vino a buscar y a salvar lo que se había perdido.

Lucas 19:10

¿Recuerdas a Adán y a Eva escondidos y avergonzados, huyendo de Dios? El pecado nos desorienta y nos avergüenza, nos hace escondernos y apartarnos de Dios aún cuando éste siempre ha estado buscando hablar con nosotros. Dios sigue buscando al hombre y a la mujer que se perdieron en sus malas decisiones, que están huyendo avergonzados, que tienen miedo del castigo de Dios, que ¡están en peligro de muerte! Porque la paga del pecado es muerte, pero Dios tiene una dádiva para todos nosotros: ¡la vida eterna!

Hoy queremos recordarte algo: Dios te está buscando pero no para regañarte ni condenarte ni destruirte, sino ¡para salvarte!

Él viene a buscarnos, a cubrir nuestra vergüenza, a sanar nuestras heridas y a encontrar una forma de restaurar nuestra relación con Él de nuevo.

Jesús tenía muy claro que estábamos perdidos, que necesitábamos ser encontrados pero sobre todo, que necesitábamos ser salvados.

Si tú conoces a alguien que se siente perdido y que necesita por sobre todas las cosas ser salvado, háblale de Jesús y dile que Él lo está buscando para salvarlo.

Serie: Jesús conocía su misión ¿y tú conoces la tuya? Revisa el Plan completo en https://instruccionespersonales.com/jesus-conocia-su-mision-y-tu-conoces-la-tuya