Levántate, resplandece; porque ha venido tu luz, y la gloria de Jehová ha nacido sobre ti.
Isaías 60:1
Tu no te puedes quedar no derrotado ni escondido, es preciso que te levantes de esa situación en la que te encuentras, para que la Luz de Cristo resplandezca sobre ti.
Repite en voz alta: para resplandecer, debo levantarme.
Esta no es una sugerencia, es una orden ¡levántate! ¡resplandece! Ha venido tu luz, la gloria de Dios ha nacido sobre ti.
Dios te ha llamado con un propósito, te ha dado el poder de elegir sabiamente, te ha puesto en un lugar donde tu fe sea edificada, ha puesto ministros que supervisen tu crecimiento y te ha dado Su palabra para que tú lo hagas también, eres llamado a crecer y a ser transformado. ¡No te rindas!
Repite otra vez: Para resplandecer, debes levantarte.
ORACIÓN: Señor te doy gracias por tu palabra que me hace levantarme y resplandecer, yo quiero servirte y seguir adelante en el nombre de Jesús. Amén.
Serie: No te rindas | Revisa el plan completo en https://instruccionespersonales.com/no-te-rindas-2/
Comentarios recientes