Os di a beber leche, y no vianda; porque aún no erais capaces, ni sois capaces todavía.
1 Corintios 3:2
Ayer el apóstol Pedro hablaba de la leche espiritual no adulterada y hoy el apóstol Pablo nos dice algo parecido: no puede darnos alimento sólido aún porque aún no somos capaces de procesarlo, por eso necesitamos seguir tomando leche.
Si aún seguimos padeciendo por los brotes no productivos es porque aún estamos inmaduros, porque aún no somos capaces de cortarlos rápidamente cuando los identificamos.
Otra de las razones para permanecer en la vid verdadera, es que solo así podremos madurar espiritualmente.
Mientras sigamos dando frutos de la carne, los brotes no productivos en nosotros ahogarán el fruto del Espíritu.
Porque aún sois carnales; pues habiendo entre vosotros celos, contiendas y disensiones, ¿no sois carnales, y andáis como hombres? 1 Corintios 3:3
¿Hay aún en ti celos, contiendas y disensiones? ¿Seguimos reaccionando como los que no conocen a Cristo? ¿Aún no te sientes capaz de dar buen fruto?
Si tu respuesta es sí, oremos juntos.
ORACIÓN: Padre, reconozco que aún no soy capaz de cortar de mi vida la carnalidad, ayúdame a permanecer en ti para madurar y ser capaz de hacer tu voluntad para mi vida, y para ayudar a otros a serlo también. Amén.
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