Pero tú has seguido mi doctrina, conducta, propósito, fe, longanimidad, amor, paciencia.
2 Timoteo 3:10
Aquí vemos a Timoteo siguiendo el ejemplo de Pablo, su padre espiritual. Si tú le has hablado a alguien de Cristo, eres su padre/madre espiritual y tienes la responsabilidad de llevar una doctrina, conducta, propósito, fe, longanimidad, amor y paciencia, intachable.
¿Cómo practicas tu fe, cómo te conduces en tu diario vivir, cuáles son tus propósitos, cómo está tu fe, cómo perseveras en las promesas, cómo manifiestas el amor y la paciencia? Tienes hijos que te están siguiendo y que más que tus palabras, van a imitar lo que te ven a ti hacer.
Hablarle a otros de Cristo nos confiere una grande responsabilidad, la de seguir su ejemplo, porque tendremos hijos espirituales que van a seguir el nuestro.
ORACIÓN: Señor, muchos me miran y quiero que te vean a ti, hoy hago a un lado mis planes y mi forma de vivir para imitarte a ti en todo, déjame conocerte más. Amén.
Serie: Sé ejemplo de vida. Revisa el Plan completo en: https://instruccionespersonales.com/se-ejemplo-de-vida/
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