Mas algunos creyeron, juntándose con él; entre los cuales estaba Dionisio el areopagita, una mujer llamada Dámaris, y otros con ellos.
Hechos 16:34
(Hechos 17:4, 16-34)
Era una mujer que vivía en Atenas. Escuchó el mensaje de Pablo y creyó en Jesucristo, convirtiéndose en una de las primeras creyentes en la ciudad. De acuerdo a las costumbres de la época, las mujeres atenienses estaban apartadas de las gestiones sociales, lo cual apoya el hecho de que fuera una mujer noble, ya que sólo aquellas con conocimiento filosófico y político asistían a reuniones públicas como la que tuvo Pablo en el Areópago (donde se controlaba a los magistrados, interpretaba las leyes, juzgaba a los homicidas y resolvían el conflicto entre los ciudadanos.) Que únicamente ella y un alto oficial ateniense sean nombrados entre los conversos, apoya aún más la sugerencia de que era una persona altamente respetada.
¿Qué lección podemos encontrar?
- La sabiduría y el conocimiento son dones que Dios reparte de forma indistinta a hombres y mujeres.
- Creer en Jesús hace que tu nombre sea recordado por tu fe, más que por tus títulos o posición social.
- La gracia de Dios otorga libertad, igualdad y fraternidad verdaderas en todos los estratos sociales.
- El mundo podrá suponer muchas cosas de ti, pero Dios lo sabe todo.
- No busques ser conocida en el mundo por tu posición o inteligencia, busca ser reconocida por Dios como una mujer que creyó en Él.
- Tu fe en Jesús es más valiosa que el oro.
¿Tú puedes encontrar alguna otra?
¿Hay algo en la vida de Dámaris que puedas aplicar el día de hoy?
¿Qué quiere decirte Dios sobre esto?
Para que sometida a prueba vuestra fe, mucho más preciosa que el oro, el cual aunque perecedero se prueba con fuego, sea hallada en alabanza, gloria y honra cuando sea manifestado Jesucristo.
1 Pedro 1:7
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100 Mujeres de la Biblia que rompieron paradigmas.
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