Mas el que fue sembrado en buena tierra, éste es el que oye y entiende la palabra, y da fruto; y produce a ciento, a sesenta, y a treinta por uno.
Mateo 23:23
En la parábola del sembrador se muestra a todo lo que estamos expuestos en nuestra vida espiritual, y al final vemos lo que sucede con el que, así como Salomón, miró, lo puso en su corazón, vio y tomó consejo, en resumen, el que oye y entiende la Palabra de Dios.
El Señor está a la puerta, llamando, y nos pedirá cuentas de todo lo que nos dio y nos aconsejó.
¿Cómo está nuestra viña? ¿Está llena de frutos o de abrojos y espinos?
¿La cerca de piedra que teníamos alrededor para que el ladrón y el salteador no entrara en ella está firme o está destruida? (Proverbios 24:30-34)
Nehemías fue un hombre que escuchó sobre el estado de los muros que protegían y rodeaban la ciudad de Jerusalén y entendió en su corazón que debía hacer algo al respecto.
Hoy nosotros debemos evaluar y no descuidar nuestra vida en Cristo, para, cuando el Señor regrese, podamos decir como Pablo a Timoteo:
He peleado la buena batalla, he acabado la carrera, he guardado la fe.
2 Timoteo 4:7
Y que a su vez, el Señor cuando vea los resultados, nos diga: Bien, buen siervo y fiel; sobre poco has sido fiel, sobre mucho te pondré; entra en el gozo de tu señor. Mateo 25:23
Hoy terminamos esta serie y agradecemos a Dios por tu vida y tu familia. Anhelamos que la semilla de la Palabra de Dios crezca y de mucho fruto en Sus corazones y que a su vez, ustedes puedan dar estos frutos a otros para saciar su hambre y sed de Cristo.
¡Dios les bendiga!
Serie: Cuidemos nuestra vida en Cristo Jesús
Revisa el plan completo en: https://instruccionespersonales.com/cuidemos-nuestra-vida-en-cristo-jesus/
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