No impongas con ligereza las manos a ninguno, ni participes en pecados ajenos. Consérvate puro.

1 Timoteo 5:22

Enseñanza de la esposa sulamita

Mas una es la paloma mía, la perfecta mía; es la única de su madre, la escogida de la que la dio a luz. La vieron las doncellas, y la llamaron bienaventurada; las reinas y las concubinas, y la alabaron. Cantar de los Cantares 6:9
(Cantar de Cantares)